Las anunciadas Reformas a la Constitución fallida con el Golpe y múltiples veces violada por la derecha y ultraderecha golpista que tiene el poder político permanente por la vía de la corrupción, asesinatos, desapariciones, todas provocadas por un Estado Oligarca Excluyente de la mayoría de la población, es una nueva maniobra de la oligarquía, que quieren aparentar contradicciones fundamentales en su seno.
¡NO A REFORMAS PARCIALES OLIGARCAS! ¡SÍ A LA CONSTITUYENTE POPULAR Y PROGRESISTA!
Las anunciadas Reformas a la Constitución fallida con el Golpe y múltiples veces violada por la derecha y ultraderecha golpista que tiene el poder político permanente por la vía de la corrupción, asesinatos, desapariciones, todas provocadas por un Estado Oligarca Excluyente de la mayoría de la población, es una nueva maniobra de la oligarquía, que quieren aparentar contradicciones fundamentales en su seno. Pretendiendo demostrar apertura a derechos ciudadanos con estas reformas, en realidad lo que demuestran es la validéz de la Constituyente, único mecanismo mediante el cual puede estructurarse una Nueva Constitución, Estado Incluyente e Institucionalidad al servicio de la nación.
Sin duda que los mecanismos de plebiscito, referendum, revocación de mandato, democaria participativa y períodos de cargos públicos son parte de estas reformas que solamente pueden ser a beneficio del pueblo hondureño si se efectúan en el marco de una amplia participación popular. Cuando son los intrumentos de la oligarquía quienes la promueven, la historia ha demostrado que es parte de una mascarada antipopular y para exclusivo beneficio de los aparatos oligarcas.
Derecha y extrema derecha de los Partidos aparentan estar en pugna. Esto no es mas que la forma de enfrentamiento por el Poder, por cuanto, en el tema de la reelección presidencial, su objetivo es fortalecer las posiciones de poder de expresidentes, casi todos corruptos, criminales y al servicio oligarca. La esencia no es alterada, por cuanto el pueblo no tiene posibilidad real de incidir bajo ese esquema cosmético. En un país donde imperan el caudillismo y la corruptela por el control del poder, NINGÚN cargo público por elección debe ser sujeto de reelección, por cuanto los méritos y capacidades no han sido los determinantes para mantenerse en los cargos. La primera vez en el Estado del siglo XXI que un Presidente como Mel Zelaya que trató de movilizar la ciudadanía en función de sus intereses y la misma derecha y ultrader3echa que ahora propone estas reformas se unieron en santa alianza para derrocar estas nobles y legítimas aspiraciones.
El M5 y el FRP, como movimientos políticos progresistas integrantes del FNRP y comprometidos con el objetivo estratégico de transformar y desarrollar la nación refairmamos que es imperativo Tener el Poder, tomarlo o acceder a él y que para ello debemos ejecutar simultáneamente todas las estrategias posibles, primero para Crear Poder, estructurando las Constituyentes locales, en Barrios y Aldeas, hasta lo nacional, en el entendido que la Constituyente como mecanismo de transformación, sólo es posible teniendo el Poder. Segundo, Construir Convergencia, actuando como un verdadero Frente Amplio, de naturaleza política que exceda lo electoral, estableciendo Alianzas tácticas o uniones estratégicas. Tercero. Edificar una Conducción Progresista, con pensamiento estratégico pluralista, con formación política y claridad de objetivos, que actúe con ética, democracia y permanente renovación de liderazgos y cuadros, garantizanmdo la participación mayoritaria de la mujer y de la juventud. Cuarto, Formar Políticamente a organizaciones de masas y a ciudadanos, mas allá de la lógica gremialista. Quinto, Actuar conforme a las bases y Movilizar Permanentemente, con objetivos estratégicos y tácticos y en áreas y regiones sensibles en la disputa del Poder. Sexto, Disputar el Poder en TODOS los planos político ideológicos, el político de masas, para crear gremios con compromiso nacional, mas allá de lo economicista, gremial y de corto lazo; el político de ofensiva, para mantener la iniciativa en la sociedad; el político defensivo, para protegerse de las embestidas del enemigo; el político electoral, en el entendido que éste último requiere de profundas transformaciones y es el área de fuerza del enemigo. En estos escenarios, el Liderazgo es determinante. Debe ser en equipo, multiideológico convergente, integrador, unificador, visionario, estratégico, democrático, antiimperialista, antioligarca, popular, protagónico y desequilibrante del poder del enemigo. Además, debe tener formación política sólida, que le permita comprender el mundo y la geopolítica. ¡Debemos evitar la Crisis de Dirección, porque nos debilita!
Reiteramos asimismo que la complejidad de la sociedad hondureña se profundizará, por cuanto derecha y extrema derecha en Honduras se está convirtiendo en la punta de lanza de la derecha internacional en América Latina, que en el pasado lejano la asumió Pinochet en Chile y en el pasado cercano Uribe, en Colombia. México se encuentra muy débil con sus problemas internos. El Chile de Piñeira no tiene un balance de poder interno favorable. Allan García en Perú no tiene credibilidad por su eclecticismo. Costa Rica no tiene fuerza creíble, mas que en la derecha Centroamérica para pretender desestabilizar Nicaragua. Martinelli en Panamá no está en condiciones de crear diferencia, por su histórica actitud procolonialista. Colombia con Santos, aparenta no asumir el papel de Uribe, porque Venezuela es la principal fuente extranjera de empleo, en mas de 1 millón de personas y además porque observa necesario acercarse al Mercosur y al Presidente Chávez, para disminuir su nivel de conflictividad interna. Sin duda, la “Colombianización” y la “Mexicanización” político ideológica de nuestra sociedad es un hecho, por represión hacia líderes y organizaciones de base. Vivimos en una guerra interna de amplitud mundial.
Ante los pueblos, reiteramos nuestra decisión de transformar la nación, haciendo de Honduras un país desarrollado, libre, soberano, latinoamericanista; creando un Estado Justo e Inclusivo que funcione para el bien común; hacer de la política una virtud y de la democracia, un verdadero poder del pueblo; que se estructure un verdadero Poder ciudadano permanente que, organizado como ciudadano protagónico y determinante, defina su propio futuro y el de la nación. Toda la institucionalidad debe funcionar para lograr estas aspiraciones. Por ello, la Constituyente es un instrumento esencial para lograr estos objetivos. Deberá garantizarse además que las políticas de Estado funcionen para lograr estas máximas, que proponga un Plan de Nación de largo plazo, que evalúe la gestión de todo el Estado y que rinda cuentas ante el pueblo.
Estos son desafíos complejos. Para ello se requiere de una Resistencia del pueblo con claridad de objetivos y permanentemente formada, organizada, movilizada y con una conducción democrática, fundada en la base, con pensamiento amplio estratégico y táctico, renovada con liderazgos jóvenes y con participación real de todas las fuerzas, organizadas y de ciudadanos, que sea capaz de construir consenso a partir del disenso, de la diversidad.
Las TAREAS URGENTES para llegar al Poder se asocian sin duda en: 1. Actuar como un frente amplio, que debe integrar todas las opciones ideológicas, políticas, de masas y ciudadano, que actúe con flexibilidad táctica; 2. iniciar el proceso de toma del Poder, en todas las formas, para integrar la Constituyente. Para ello se requiere transformar la Conducción del Frente y todas las Comisiones internas, hacia la materialización del objetivo estratégico de transformar la nación y los objetivos tácticos de la Toma del Poder.3. exigir justicia contra los golpistas; y 4. lograr el retorno con garantías y todos los derechos ciudadanos del Presidente Manuel Zelaya Rosales; 5. Combatir y eliminar el Bipartidismo, enjuiciando simultáneamente a los golpistas, y su posible conversión en un partido de unidad de la derecha y extrema derecha y a sus aliados, instrumento de dominación de la oligarquía.
Simultáneamente, como lo hemos dicho desde el golpe de Estado, debemos crear poder. Para ello es necesario organizar las Constituyentes de Barrios, las cuales a su vez conformarán las Constituyentes Municipales, Departamentales y la Nacional, en las cuales propondrán todas sus aspiraciones para edificar la Nueva Honduras. De ello se forjarán los nuevos liderazgos de la nación. Todo esto se efectúa en un contexto de un debate permanente de ideas y propuestas. La toma del Poder solamente es posible si sabiamente combinamos y actuamos inmediatamente dos plataformas: la estructura Política, dispuesta a disputar el poder en TODOS los planos; y crear verdaderas organizaciones políticas de masas, con visión de clase, nacional y regional, mas allá de su interés gremial. La toma del Poder por la vía Político Militar parece ser mas compleja y de largo plazo. Todo esto significa combatir la oligarquía obscurantista, corrupta, criminal, quien, utiliza el monopartidismo ideológico o bipartidismo político y sus partidos satélites, para imponer su visión clasista, todos corresponsables del atraso de la nación. Significa también luchar contra dogmatismos, sectarismos y prácticas antidemocráticas.
¡LA UNIDAD DE LA RESISTENCIA ES ESENCIAL PARA TOMAR EL PODER Y TRANSFORMAR LA NACIÓN.
¡TODO DESDE EL FRENTE, NADA FUERA DEL FRENTE!
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