Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. La llegada o no a Honduras del cantante puertorriqueño Ricky Martin se ha vuelto una polémica que ha confrontado al Cardenal Rodríguez, expresión de la secta de extrema derecha llamada “Opus Dei”, con la Fiscal de Derechos Humanos del Ministerio Público, Sandra Ponce.
El Secretario del Interior, Áfrico Madrid, informó hoy que el cardenal católico y la confraternidad evangélica de Honduras le expresaron que Martin representa valores contrarios a los mandatos bíblicos, pero la Fiscal de Derechos Humanos, ha advertido al funcionario que si no se permite el ingreso del cantautor se le demandará por discriminación.
Tegucigalpa. La llegada o no a Honduras del cantante puertorriqueño Ricky Martin se ha vuelto una polémica que ha confrontado al Cardenal Rodríguez, expresión de la secta de extrema derecha llamada “Opus Dei”, con la Fiscal de Derechos Humanos del Ministerio Público, Sandra Ponce.
El Secretario del Interior, Áfrico Madrid, informó hoy que el cardenal católico y la confraternidad evangélica de Honduras le expresaron que Martin representa valores contrarios a los mandatos bíblicos, pero la Fiscal de Derechos Humanos, ha advertido al funcionario que si no se permite el ingreso del cantautor se le demandará por discriminación.
DEMANDARÁN A FUNCIONARIO Ponce explicó que Honduras ha suscrito tratados internacionales de no discriminación sexo, raza y demás acuerdos que protegen el derecho de los hombres y mujeres y, por tanto, todas las personas deben ser tratados con igualdad ante la ley y en este caso el Ministerio Público está en la obligación de actuar en defensa de los Derechos Humanos.
El concierto del artista previsto para mediados de octubre ha generado una reacción virulenta en sectores religiosos dogmaticos que apoyaron el golpe de Estado, la dictadura y la represión brutal contra el pueblo hondureño que costó más de 200 ciudadanos asesinados y más de 5,000 violaciones graves de derechos humanos, sobre todo, en el segundo semestre de 2009.
GAY ASESINADOS EN EL OLVIDO
La comunidad Gay-lésbica en Honduras a través de José Zambrano ha demandado a la fiscal de Derechos Humanos, Sandra Ponce que, en lugar de preocuparse por la realización del concierto de Ricky Martin, por fin ofrezca respuestas concretas y se presente ante los tribunales de la república a los responsables materiales e intelectuales de los asesinatos de miembros de sus organizaciones, cuyas vidas fueron cegadas debido a sus valientes posturas opuestas al golpe de Estado y a la dictadura que surgió a raíz del derrocamiento del Presidente Manuel Zelaya, ejecutado el 28 de junio de 2009 por los militares y financiado por la oligarquía palestina-criolla.
GOLPISTAS CONFRONTADOS
El “show sexo, cuerpo y alma” como se denomina al evento que desarrollará Ricky divide a sectores golpistas, porque precisamente
quien lo promueve es una mujer con participación visible y muy activa antes, durante y después del golpe de Estado del 28 de junio de 2009, Marcia Facussé, vinculada por consanguinidad a la oligarquía palestina golpista y al consorcio de medios de comunicación “Televicentro”.
Zambrano explicó que en el país hay una marcada xenofobia y las posturas institucionales generan odio y violencia contra los sectores de diversidad sexual, pero aclaró que el Estado debe esclarecer cuanto antes los asesinatos contra miembros de los grupos de diversidad sexual.
El Secretario del Interior cuestiona a Marcia porque ha comenzado a vender los boletos para el concierto sin que se le haya extendido el permiso para ejecución del evento.
COSTOS DEL CONCIERTO
Los costos para presenciar el espectáculo de Martin van desde 315 lempiras hasta 1,900 en sitios preferenciales. La crítica de los religiosos también se ha centrado en que no es posible el gasto que implica la presencia de Martin por los costos sociales heredados por el golpe de Estado, aumento en los precios de la alimentación, alza imparable en costo de los combustibles que ha impacto en el costo de vida.
La Biblia es el libro más vendido de todos los tiempos, con 20 millones de ejemplares en el mundo, pero nunca supera a los 100 millones de grabaciones vendidas por Ricky Martin, que lo convierte en uno de los artistas latinos más exitosos.
